
En Tarifa, la localidad más meridional de Europa, donde se unen el Atlántico y el Mediterráneo, conocida internacionalmente por deportes como el windsurf o kitesurf, cada primer domingo de septiembre, la imagen de Nuestra Señora de la Luz, Patrona de dicha localidad, es escoltada a caballo (de interés turístico de Andalucía) desde su santuario (situado a unos 8 kilómetros) hasta Tarifa. Allí estará hasta el último domingo de septiembre, en la Iglesia Mayor de San Mateo. Ése día es escoltada hasta su santuario, pero esta vez, a pie, en devota romería, por todos aquellos que así lo desean, que suelen ser cientos de fieles. El día anterior, el sábado, a partir de las 16.00 horas, todos los que así lo desean, pasarán por debajo de su manto, aprovechando para darle gracias por el año anterior, rezarle, orarle y pedirle protección para el año-curso próximo.
Hoy, la Virgen de la Luz, como es habitual, llegará sobre las 20.30 horas a la entrada del municipio. Allí la reciben con una Salve la Junta de Gobierno de la Hermandad, Autoridades, el Clero, Consejo local de Hermandades y Cofradías, los hermanos mayores de las demás Hermandades, reinas y damas de las fiestas (que empiezan hoy) y la Banda de Música. Todos la acompañarán en procesión, además de las personas y cabalgatistas que la escoltaron desde su salida del santuario, cuya salida es a las 16.30 horas.
En la puerta del templo, después de que los cientos de cabalgatistas pasen por delante de la Señora, tiene lugar la Salutación a la Virgen, que en esta ocasión será a cargo del párroco.
Durante el mes de septiembre, varias actividades y cultos, entre los que podemos destacar la procesión, (el segundo domingo), la función principal (el día 8, por ser el día de la natividad de la Virgen) y la novena (a partir de la segunda semana); tienen lugar en honor a la Patrona, cuya hermandad tiene el título de Real y Pontificia.
Es un mes grande para esta localidad, pues es cuando los fieles tienen a su Patrona en él y todos se sienten más cerca de María.
Aprovechemos también para estar cerca de la Virgen y preparar así el mes de octubre, que como todos sabemos, es el mes que la Iglesia dedica al Santo Rosario.
Nos despedimos rezando:
Dios te salve maría, llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de Tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Que María os proteja e interceda por vosotros.